Cantabria en bici

Ascensión al Pico Tresmares desde Riaño

Ruta 85

Por: Javier Tovar, Pedro Ceballos, y Michael González Harbour

Mapa

Datos Básicos




Kilómetros
34
Desnivel acumulado
1329
Cota Máxima
2178
Duración
4 horas
Lugar de inicio y final
Riaño
Dificultad
Alta
Mes en que se realizó
Septiembre de 2008
Época recomendada
Verano, principio del otoño

Descripción

El Pico Tresmares es posiblemente el punto más alto que se puede alcanzar pedaleando en bicicleta dentro de Cantabria. La existencia de una estación invernal con remontes mecánicos y varias pistas de esquí supone un gran deterioro de este entorno natural de alta montaña, pero facilita el acceso gracias a una carretera que asciende casi hasta la misma cresta de la Cordillera. Desde ella las vistas que se alcanzan son realmente espectaculares. Eso unido a lo divertido que supone el descenso por las pistas de esquí, hacen que esta ruta sea para disfrutar mucho.

Comenzamos a pedalear en el pueblo campurriano de Riaño, circulando por el carril bici paralelo a la carretera general, en dirección a Entrambasaguas y La Lomba. Cuando se acaba el carril bici seguimos un poco por la carretera para desviarnos enseguida a la derecha por una pista que nos lleva al bonito pueblo de Abiada.

Después de cruzar el pueblo continuamos por la pista en suave ascenso mientras vamos deshaciéndonos del fresco de la mañana. Adelante vemos un pequeño bosque hacia el que nos dirigimos, y en el que se interna la pista durante un rato. Al salir del bosque la pista toma más pendiente y se va volviendo más pedregosa, hasta el punto que en algunos tramos debemos desmontar. Vemos un ciervo macho muy bonito en la distancia.

Después de una pequeña bajada la pista se convierte en un camino de servicio de un tendido eléctrico que, debido a la erosión de la lluvia, se halla en muy mal estado y no es ciclable. Por ello, abandomanos el camino para subir campo a través por un cortafuegos y luego por las brañas. Al principio debemos subir andando debido a la combinación de la pendiente y del terreno, pero cuando nos vamos acercando a la parte más alta del monte podemos volver a pedalear. Lo hacemos campo a través, hasta ver al final de las brañas las antenas de la estación invernal de Brañavieja, hacia la que nos dirigimos.

En la estación invernal tomamos la carretera que asciende hacia la Fuente del Chivo. Acostumbrados a ver las pistas de esquí con nieve nos impresiona el cambio de paisaje tan acusado, con todas las pistas al descubierto por la ausencia de nieve. Podemos ver fácilmente el deterioro que imponen los desmontes realizados para hacer las pistas y sus accesos, en este entorno natural.

El ascenso por la carretera es cómodo, aunque hay algunas rampas fuertes. En breve tiempo llegamos al mirador de la Fuente del Chivo y allí nos deleitamos con las vistas del valle de Polaciones, con Peña Sagra y los Picos de Europa al fondo.

Continuamos el ascenso por una pista situada en las cabeceras de las pistas de esquí, y llegamos así a un camino que asciende hacia la cumbre. El camino tiene un primer tramo ciclable que nos lleva hasta nuestro techo de altitud en bici, situado a 2160 metros de altitud. Allí dejamos las bicis y recorremos a pie los últimos metros para asomarnos al balcón construido en la misma cima. Podemos contemplar claramente las tres vertientes que dan nombre al Pico Tresmares. Una gota de agua que caiga en la cumbre puede dirigirse hacia el sur, llegando así al río Duero y después al Atlántico, o puede dirigirse hacia el Noroeste, cayendo al valle de Polaciones para ser arrastrada por el río Nansa hacia el Mar Cantábrico, o puede caer hacia el Este en la cuenca del río Híjar, siendo arrastrada hasta el río Ebro y por él al Mar Mediterráneo.

Después de disfrutar de la cumbre un rato iniciamos el descenso por la misma pista por la que subimos. Cerca de la Fuente del Chivo nos desviamos a la derecha para bajar por una pista de esquí de pendiente suave que se inicia allí. Durante un buen rato disfrutamos de las pistas, saltando entre piedras y recorriendo campo a través el terreno hasta alcanzar la base de la estación invernal. Desde allí, un rápido descenso por la carretera nos lleva hasta el coche que nos espera en Riaño.

Perfil

Fotos


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El valle de Campoo, con el frescor de la mañana

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La pista se interna un rato en un bonito bosque

foto 3
El ascenso se hace duro
foto 4
Las piedras del camino nos obligan a desmontar

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El último tramo de ascenso a la estación invernal
lo hacemos campo a través

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La estación invernal de Brañavieja
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La subida hasta la Fuente del Chivo es por asfalto
foto 8
En el mirador de la Fuente del Chivo tenemos espectaculares vistas
del valle de Polaciones y de Peña Sagra

foto 9
Las pistas de esquí por las que descenderemos luego

foto 10
Desde el Pico Tresmares disfrutamos de hermosas vistas de la Cordillera
foto 11
Peña Labra, vista desde el Pico Tresmares,
con la Montaña Palentina detrás
foto 12
El descenso por las pistas de esquí es muy divertido

Descargas

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